La asistencia al Simposio de la sección catalana de la Sociedad Española de Estudios Clásicos, celebrado el pasado fin de semana en Tarragona, ha sido ocasión para cubrir varios objetivos.
Como aperitivo, el jueves tuvo lugar la visita con mis alumnos a la Tarraco romana, que se vio abundantemente pasada por agua, aunque pudimos cubrir casi todos los objetivos.
Puestos ya en el Simposio, hubo ocasión de presentar Chiron, junto con Sebastià, ante tantos colegas; de asistir a ponencias, comunicaciones y mesas redondas interesantes; de compartir unas horas con Sebastià, Ana, Margalida y Jose, compañía siempre agradable y provechosa (proyectos, ideas, ilusiones... y algunas carcajadas); de conocer a Montserrat, que tanto hace por la divulgación de la cultura clásica; de charlar distendidamente con tantos colegas; de encontrarme con Blanca, una de las primeras galardonadas con el Centauro de Oro de Chiron, y que cursa ya tercero de Filología Clásica...
Pasados los aguaceros del jueves, el resto de los días Tarragona lució como siempre bajo el sol y junto al Mare Nostrum. Sin embargo, lo más importante es siempre la grata compañía.
3 comentarios:
Ya estoy contando los días que faltan para repetir comidas y risas, pero esta vez en Sagunt. Siempre es una alegría encontrarte, Luis. Es una pena que no pudiera asistir a la presentación de Chiron, pero estoy convencida de que a pesar del escaso tiempo, dejasteis el pabellón muy alto. La próxima vez, a ver si alguien se acuerda de las fotos...
¡Qué buena compañía, Luis! ¡Qué envidia! Siempre me quedará Sagunt. Hasta entonces un fuerte abrazo.
Encantat d'haver compartit amb tu feina i divertiment, encara que alguns diuen que no s'ha de barrejar.
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