jueves, 30 de diciembre de 2010

Los Magos de Oriente (Οἱ Μάγοι)

La fiesta de los Reyes Magos se celebra desde el siglo IV, y parece ser que es la respuesta de la Iglesia a una  celebración solar pagana. Se explica así que la Epifanía (Ἐπιφάνεια) se llame en oriente 'la santa luz'.
 La palabra 'Magos' (en griego Μάγοι) era con la que se designaba a la casta de sacerdotes persas y babilonios dedicados al estudio de la astronomía y de la astrología. El hecho de considerarlos reyes es de origen posterior.

Pero, ¿qué hay de real en esta historia? ¿Hubo de verdad una estrella que les conducía?
La más antigua representación de los Magos. (Mosaico de Rávena, siglo IV)
En 1603, Johannes Kepler observó al telescopio el acercamiento de Júpiter y Saturno en la constelación de Piscis y se preguntó si ese hecho tendría algo que ver con lo referido en el evangelio. Sus cálculos le llevaron a descubrir que una conjunción así se produjo en el año 7 aC.

En 1925, el alemán P. Schnabel descifró unas anotaciones babilónicas en escritura cuneiforme procedentes de la ciudad de Sippar, cerca de la confluencia del Tigris y el Éufrates. Esa tablilla se puede ver ahora en el Museo estatal de Berlín. En ella hay un dato sorprendente: la conjunción de Júpiter y Saturno en la constelación de Piscis tuvo lugar tres veces a lo largo del año 7 aC., la última del 5 al 15 de diciembre, y fue vista en buena parte del Mediterráneo.

Según Giovanni Magnani, catedrático de Fenomenología de la religión, en la antigua astrología, Júpiter era considerado como la estrella del Príncipe del mundo y la constelación de Piscis como el signo del final de los tiempos. El planeta Saturno era considerado en Oriente como la estrella de Palestina. Cuando Júpiter se encuentra con Saturno en la constelación de Piscis, significa que el Señor del final de los tiempos se aparecerá ese año en Palestina. Con esta expectativa llegan los Magos a Jerusalén, según el evangelio de Mateo 2,2.


Parece ser que los restos de los Magos estuvieron en Constantinopla hasta el año 474 dC., de donde fueron llevados a la catedral de Milán, hasta que en 1164 se trasladaron a la de Colonia, donde permanecen.

2 comentarios:

Negrevernis dijo...

Yo tengo dudas fundadas sobre la verdad histórica de estos personajes, pero no sobre su significado: la Palabra de Dios que llega a todos los rincones conocidos en aquel momento.

El rey Baltasar se "volvió" negro por esta razón: cuando se cruzan las fronteras y se conoce el corazón de África, la Iglesia responde transformando la piel blanquecina original de este rey. En origen, artísticamente, además, no eran necesariamente tres...

Pero sea como sea, que sigan viniendo puntualmente cada 5 de enero con sus regalos.

Un saludo y buen 2011

Isabel dijo...

Gracias por tu comentario en mi blog.Solo espero que el nuevo año sea un poquito mejor, se lo pediré a los Reyes Magos no te parece? a ver si no tienen demasiadas peticiones de ese tipo y me lo conceden.
Un fuerte abrazo.