Esto es un no parar. Del miércoles al viernes pasado, Tarraco vivió una nueva etapa del proyecto 'Dos mil años por correo', comenzado hace ahora un año. Hacia allá me fui con los alumnos de segundo de bachillerato, que tienen como materia de selectividad precisamente la capital de la Tarraconense.
Esta vez no pudo acudir el grupo de Benicàssim, aunque Ana quiso estar el viernes en la despedida, junto con Sebastià y Jose (¡gran detalle!). Sí que estuvieron los de A Estrada (también de segundo de bachillerato), y una muy nutrida representación de Almendralejo (de 4º de la ESO a segundo de bachillerato).
Si se aprovechan bien, reuniones como la de Tarragona sirven de mucho: conocimiento y estudio de lugares de nuestra historia clásica, nacimiento y consolidación de nuevas amistades, intercambio de experiencias entre profesores... De todo ello hubo en Tarragona.
Ahora, a esperar la última actividad del proyecto... en Mérida.
Pero antes (es decir, ya), un viaje a Sagunt y a la recién estrenada Domus Baebia Saguntina con mis alumnos de cuarto. Será como un añadido a 'Dos mil años por correo', con lo cual habrán estado implicados todos los alumnos de latín del Instituto. Participaremos en cuatro talleres (cosmética, cocina, mosaico y cómputo del tiempo) y visitaremos el Museo y los restos romanos de la ciudad (teatro, castillo, foro...). Habrá cumplida reseña dentro de pocos días.
No hay comentarios:
Publicar un comentario